Después de un tocho de 1000
páginas, rico rico y con fundamento (y bastantes líos en el trabajo) el cerebro
me pide chorradas y risas fáciles.
Título: El bufón
Autor: Christopher Moore
Título original: Fool
“Bolsillo
ha sido el apreciado bufón de Lear durante años, desde la época en la que las
hijas del rey – la egoísta e intrigante Goneril, la sádica pero erótica Regan y
la dulce y leal Cordelia – eran apenas unas niñas.
Así
que como es natural, Bolsillo está junto a su anciano señor cuando Lear exige
que sus hijas hagan un juramento de amor y devoción eternos ante un nutrido
grupo de invitados. Goneril y Regal no tienen inconveniente en tratar de
congraciarse con su padre. Pero cordelia considera que la petición de su padre
es un poco… estúpida, y su sinceridad acaba por costarle la parte del reino que
le corresponde, al tiempo que es enviada al exilio.
Así
las cosas, todo el país se encuentra en peligro debido al orgullo herido de un
viejo tuozudo. Y la única persona que, quizá, sea capaz de arreglar el entuerto
es Bolsillo, un payaso enclenque con un mordaz sentudo del humor. Ya ha logrado
evitar la catástrofe en numerosas ocasiones y ahora se verá obligado a realizar
unas maniobras bastante complejas – hacer algunos hechizos, instigar algunos
asesinatos y provocar un par de guerras- para que Cordelia vuelva a gozar del
beneplácito de su padre, para hacer descarrilar los tejemanejes de las malvadas
hermanas y, de paso, liarse con todas las jóvenes dispuestas a ello…”
Si alguien tiene cierto cariño al
Rey Lear de Shakespeare, por favor,
que no se lea este libro. Tal como los Monthy Python cogieron las leyendas
artúricas para crear su conocida película, Moore parte del argumento del Rey
Lear y lo pervierte de la manera más atroz para crear esta novela. La cantidad
de chorradas, absurdeces y gilipolleces que consigue meter dentro de la
historia constituye una hazaña digna de mérito. La obra original queda patas
arriba gracias a una perspectiva perteneciente al siglo XXI que convierte el
desarrollo en una animalada muy salvaje sin dejar (es curioso) de ser un Lear
reconocible.
Moore es bueno creando estupideces
sin límite y consigue momentos de una agudeza muy incisiva, pero flojea a la
hora de intentar tejer una historia con corrección. En El ángel más tonto del mundo o en Un trabajo muy sucio esto no molestaba ya que la exigua trama era
excusa suficiente para mantener el tinglado, pero El Rey Lear pide más chicha y ahí descarrila. El desarrollo falla por todos lados, volviéndose incluso cansino, por lo que, tras un puñado de páginas de historia, acabas pidiendo que lo deje estar y vuelva a su descacharrante esquema de chistes sin parar. Por suerte el libro es corto y estas páginas no duran mucho, pero se nota.
Es el extravagante personaje de Bolsillo el bufón (que recuerda mucho a
Rincewind) el que sostiene un engendro de novela con personajes incoherentes,
un desarrollo errático y muchas idas de olla. Él es el único que parece pensar
y actúa de una manera más o menos lógica desde su poco afortunada profesión,
gozando de las mejores frases y los chistes mejor encontrados.
Aunque es francamente irregular y
marcadamente inferior a otras obras del autor, contiene suficientes gracias
para que pase con agrado. Me recuerda mucho a los programas de Muchachada Nui, dónde encuentras tal
cantidad de gilipolleces condensadas que es imposible que no haya alguna que te
saque una risotada.
Hay que leerlo con la simple idea
de pasar un buen rato y echarte unas risas sin exigencias. Sirve bien para
ello y se devora en nada, que a veces es
lo que interesa.
Nota: 3
Nota anobii: 3.2/5
No hay comentarios:
Publicar un comentario