Este bimestre me han “mandado” leer en la CLO
este best-seller, que también resulta ser el libro Nº17 de mi cesta. Dos
pájaros de un tiro.
Autor: Khaled Hosseini
Título original: A thousand splendid suns
“Hija
ilegítima de un rico hombre de negocios, Mariam se cría con su madre en una
modesta vivienda a las afueras de Herat. A los quince años, su vida cambia
drásticamente cuando su padre la envía a Kabul a casarse con Rashid, un hosco
zapatero treinta años mayor que ella. Casi dos décadas más tarde, Rashid
encuentra en las calles de Kabul a Laila, una joven de quince años sin hogar.
Cuando el zapatero le ofrece cobijo en su casa, que deberá compartir con
Mariam, entre las dos mujeres se inicia una relación que acabará siendo tan
profunda como la de dos hermanas, tan fuerte como la de madre e hija. Pese a la
diferencia de edad y las distintas experiencias que la vida les ha deparado, la
necesidad de afrontar las terribles circustancias que las rodean – tanto de
puertas adentro como en la calle, donde la violencia política asola el país-,
hará que Mariam y Laila vayan forjando un vínculo indestructible, que les
otorgará la fuerza necesaria para superar el miedo y dar cabida a la
esperanza.”
Aprovechando la biografía (ficticia pero
reconocible) de dos mujeres afganas, Khaled Hosseini realiza un buen retrato de
la evolución de la sociedad afgana en los últimos cuarenta años. El relato se
establece con dureza, mostrando desde un primer momento la vida cotidiana en el
país. La sociedad patriarcal dominante oprime con fuerza a las mujeres,
reducidas en muchos casos a existir como meros muebles o animales domésticos en
el hogar.
Khaled Hosseini saltó a las estanterías del
éxito con el particular “slice of life” afgano que fue Cometas en el cielo, en el que combinaba sus recuerdos de infancia
en Kabul con una historia pequeña, cotidiana y tierna. Rápidamente, su prosa
fácil y su estilo conmovedor llamaron la atención de muchos. Su segunda novela
busca con acierto la denuncia social, sin por ello alejarse de un estilo que
permite al lector sumergirse en una hermosa y triste historia.
Es obvio que el objetivo del libro es llamar
la atención al público occidental y servir de recordatorio de los problemas que
soporta “ese país de ahí que sale en las noticias y se tiran bombas”. Se centra
especialmente en las duras condiciones que tienen que soportar las mujeres y lo
hace a través de dos ejemplos bien diferentes, pues ambas provienen de dos estratos y dos
familias diferentes, pero ello no les sirve de nada ante los avatares del destino y,
principalmente, las reducidas opciones que ofrece la sociedad afgana. La
denuncia social es siempre necesaria y, evidentemente, la historia a tratar es áspera,
con momentos desagradables, pero Hosseini consigue una emotiva narración, con
pasajes llenos de ternura y esperanza. En todo momento transmite sensación de
realismo y, a pesar de lo descorazonador de la historia, se hace fácil de leer.
Los personajes que pueblan la (no tan)
ficción que crea el autor son muy vívidos, se hace fácil empatizar con ellos y
aguantan muy bien el peso de la historia.
Mariam es una
bastarda, nacida fuera del matrimonio y directamente repudiada por la sociedad.
A pesar de haber nacido y haberse criado en unas condiciones infernales,
intenta mantener siempre una actitud positiva, haciendo lo posible por ser
feliz. Cuando se le “ofrece” la posibilidad de un matrimonio, ve en ello un
objetivo vital: tener un marido al que querer y darle hijos. ¡Por fin su
existencia va a tener algo de sentido! Sí, su futuro marido la ha comprado y
ella no ha podido negarse a ello, pero todo sea por salir de la situación en
que se encuentra, aunque sea a costa de convertirse en un muebla más de la
casa.
Rashid es un hombre
entrado en años que perdió a su familia en un accidente de tráfico. No desea
otra cosa que tener una mujer que le de un hijo y le sirva en el hogar. En un
primer momento le vemos contento e ilusionado por su nueva “compra” pero pronto
se cansa y le impone sus tiránicas reglas. Vuelca en Mariam todas sus
frustraciones y se desahoga con ella por todas las cosas que le ocurren,
atormentándola y apalizándola rutinariamente. Para él, las mujeres son una
molestia que hay que soportar para tener hijos, un animal doméstico más que
debe obediencia y sumisión y del que abusar cuando se requiera un castigo o
cuando se necesite algo de diversión. Aunque pueda parecer lo contrario, en
ningún momento se le demoniza gratuitamente. Su personalidad está construida
con precisión y sigue unas pautas de comportamiento coherentes con su
mentalidad. No es que sea una mala persona (ejem), sino que se presenta como el
hombre habitual de la sociedad, dejando claro que hay gente mejor y peor que
él.
Por su parte, Laila es la hija de un profesor universitario, educada en un
ambiente mucho más sano e ilustrado. Goza de una niñez tranquila y feliz que se
ve truncada cuando los soviéticos invaden el país, provocando una guerra civil
que durará varios años . Los estragos de la guerra causarán estragos en la
familia, pero ella sigue luchando por salir adelante y progresar. La llegada de
los talibanes provocará la destrucción de todas las esperanzas para las mujeres
de llevar una vida digna. Laila se refugiará en casa de Rashid, encontrando un
resquicio de paz, pero él sigue ávido de churumbeles y ahí continuará su
pesadilla.
El libro combina el drama de una historia
cotidiana, unos personajes con los que es fácil identificarse, un ritmo vivo e
interesante y una encendida denuncia sobre los problemas de un mundo no tan
lejano. Una vez lo empiezas, es fácil lanzarse en sus páginas, compartir las
desventuras de (ya) nuestras esforzadas heroínas y comprender cómo se ha
convertido en el best-seller que es. Bonito con ganas.
Nota: 8
Nota anobii: 4.5/5
No hay comentarios:
Publicar un comentario