Título: El festín del amor
Autor: Charles Baxter
Título
original: The feast of love
“En esta recreación de
Sueño de una noche
de verano, hombres y mujeres evocan y
desean a los compañeros perfectos que podría haber escondidos en una esfera
ignota de posibilidades. El dueño de una cafetería recuerda el día en que su
primera mujer pareció alcanzar un instante de simple perfección; ella, por su
parte, rememora su fascinación ante la belleza de una contrincante en un
partido de softball. Una pareja de adolescentes pasa horas en el café nutriendo
la idea de su amor ardiente. Un profesor de filosofía intenta explicar, ante
una taza de café, lo que sabe que es inexplicable: las razones del corazón.
Gentes diversas, unidas por las sinuosidades del amor, componen un tapiz que
describe la fuerza más irresistible de la vida.”
Después de un inicio ciertamente inusual -el “autor” se
despierta una noche, decide salir a pasear y se encuentra a un amigo
noctámbulo, Bradley. Comienzan a hablar sobre el libro que Baxter está
escribiendo y Bradley se ofrece como personaje-, encontramos el desarrollo de una
serie de tramas muy bien hilvanadas. Son diferentes historias que tratan sobre
el amor y de cómo cada persona lo vive de una manera diferente, con unas
expectativas y una entrega diferente. Lo mejor de la obra es que el autor consigue
dotar de autonomía a cada historia por separado entrelazándolas de manera que
se van intercambiando con una frescura y una ligereza remarcables. Todos los
personajes y las historias están interrelacionados, son creíbles y cercanos y
despliegan una gran ternura sin caer en el exceso de edulcorante en ningún
momento.
Conoceremos las relaciones de distintas parejas, encuentros
y desencuentros, y vemos los efectos del amor y el desamor en cada una de las
personas. Poco a poco se van desgranando las historias de todos los personajes
tejiendo un entramado amoroso variopinto y sorprendente, pues cada uno de ellos
tiene conceptos diferentes del amor y busca algo diferente en la vida.
Bradley: El personaje principal de la obra. Busca a alguien a quien valga la pena amar y quedarse a su lado. Deseoso de entregar amor, sólo espera encontrar a alguien que quiera aceptarlo sinceramente, al que idealiza al momento. Es un personaje muy bien construido con un carácter muy “achuchable” sobre el cual fluye la historia pasando de situaciones melancólicas a otras cómicas con una facilidad sorprendente. Durante su tiempo libre se dedica a pintar y expone “El festín del amor” -su mejor obra- en su cafetería, pintura a través de la cual gira toda la trama.
Chloe y Oscar: Son dos jóvenes díscolos que han encontrado en su relación un destino en común para sus vidas. Su amor es pasional, sincero y de entrega
plena en todos los planos, tanto emocional como físicamente. Son conscientes de
que la vida es corta y que es necesario aprovecharla al máximo, a pesar de los
fantasmas que cada uno arrastra del pasado.
Kathryn: Primera mujer de Bradley, con quien se casa
simplemente porque él es buena persona y la quiere. Sin embargo, a medida que
pasa el tiempo, busca otras cosas más prohibidas en su matrimonio.
Diana: Segunda mujer de Bradley, eminentemente práctica. Se
casa con Bradley porque es un buen partido, aunque en ningún momento llega a
quererlo. Para ella, las relaciones de pareja son algo conveniente y práctico.
Su amor es totalmente racional y reflexivo, ya que está con alguien porque
añade algo que ella no tiene, no por estar enamorada de esa persona.
David: Es todo un musculitos, para él el amor es algo
puramente físico. Si hay buen sexo, no se necesita nada más. No se siente
cómodo expresando sus sentimientos y no quiere complicarse la vida. Quiere
pasárselo bien e ir a la cama rápido.
Henry y Esther: Son los vecinos de Bradley y llevan muchos
años de matrimonio. Para ellos el amor se ha convertido en una amistad a toda
prueba llevada a unos límites insospechados. Se conocen tan a fondo que muchas
veces no necesitan decirse nada para saber que necesita el otro. Henry es
profesor de filosofía y hace las veces de narrador que va explicando las
diferentes vertientes del amor e introduce las diversas historias.
Como la mayoría de historias historia corales de “gente
corriente”, no tiene ningún afán de trascendencia ni busca sentar cátedra. Es
un libro muy ligero y agradable de leer que viene muy bien como intermedio
entre otras obras más densas. Su historia es fresca y divertida, despliega
ternura sin saturar y resulta fácil identificarse con los personajes ya que son
muy cercanos y realistas.
Nota: 6
No hay comentarios:
Publicar un comentario