¡Hola
a todos!
Ya
estamos en Febrero y algunos me habéis recordado que este año no he escrito mis
recomendaciones de 2019. En efecto, he estado un poco (muy) liado este inicio y
se me había pasado completamente.
Ahora
ya en estas fechas queda un poco rarito el ponerse con el ránking del año
anterior, pero bueno, es en estos días cuando tengo el tiempo para repasar lo
que he escrito y destacar las cosas mejores.
Así
pues, repasemos primero las reglas: Tanto en libros como en Películas, no me
importa de cuándo es la obra. Lo importante
es cuando se ha escrito la reseña. Así de simple. Me da igual leer un
libro del siglo IV, si la reseña se hace en 2019, entra en el ránking de 2019.
Ojo, si se revisita la obra a lo largo del año, también cuenta (aunque creo que
todavía no ha ocurrido, jeje).
Bueno,
nos ponemos con los libros, que es lo que da origen a este compendio:
Este
año ha sido uno de los más difíciles a la hora de escoger. He leído mucho y muy
bueno. Pocas veces me ha dolido tanto ver qué libros se han quedado fuera de
los destacados, pero sólo hay espacio para tres. Curiosamente, ninguno de
ciencia-ficción (ya parece que no leo apenas este género).
LO
MEJOR
El
primero de los libros es Memorias
de Adriano, de Marguerite Yourcenar. Empezar el año con un libro así es
toda una experiencia, no lo voy a negar. El libro presenta una (ficticia)
autobiografía del Emperador Romano Adriano escrito en una serie de cartas que
lega al que será su sucesor, Marco Aurelio. Desde el punto de vista de un sabio
en senectud, repasamos lo que ha sido su vida, mientras reflexiona con una
brillantez apabullante sobre el sentido de la vida, la belleza, el deber de un
emperador y otras cuestiones vitales para el ser humano. Bellamente escrito por
Yourcenar, cada página es para releer unas cuantas veces, tanto para apreciar
la espectacular prosa como para disfrutar de la interesante vida de uno de los
grandes hombres de la historia de la Humanidad.
Posteriormente,
nos vamos a la España profunda, con Los
Santos Inocentes, de Miguel Delibes. En él, se nos presenta un (durísimo)
retrato de la vida en un cortijo cualquiera de España ya bien entrado el siglo
XX. Desesperanzador y triste testimonio del poco valor de la vida de los
vasallos, doloroso en su realismo al mostrar su total dependencia de la
voluntad del amo, impotentes ante la imposibilidad de salir de la rueda que la
sociedad del momento (no tan lejano) tiene montada para ellos. Contiene a unos
personajes inolvidables esculpidos con inusitada maestría y una historia que se
clava en el alma, todo ello descrito por un verdadero orfebre de las palabras.
En otras palabras, indispensable (aunque salgas del libro con un cabreo
morrocotudo con el mundo).
Y
acabamos con otro libro indignante, de los que dejan huella a los valientes
masoquistas que acometen sus numerosas páginas: Hermana
mía, mi amor, de Joyce Carol Oates. Utilizando como excusa la polémica
muerte de una estrella del patinaje infantil, Oates realiza un profundo retrato
de todos los fantasmas de la sociedad estadounidense de principios de siglo
XXI. Realizada a partir de los falibles recuerdos de un narrador poco fiable,
el libro obliga a un gran esfuerzo al lector para captar la verdad de los
hechos. Todo ello a través de una prosa punzante en la que se tallan, con
virtuosismo de escultor unos personajes llenos de aristas que seguro que no
dejan indiferente a nadie.
LO
PEOR
Este
año apenas he leído dos libros que merezcan la categorización de “malos”. Sin
embargo, uno de ellos ha realizado méritos más que suficientes para quedarse el
título de “el peor” sin ningún tipo de discusión. Y me fastidia un poco más por
el hecho de que se trata de un libro famoso, con nombres importantes
implicados.
Se
trata de Nocturna, Guillermo del Toro y Chuck Hogan. Aunque empieza bien como una
escalofriante historia de vampiros, pronto
deviene un extraño correcalles con personajes desdibujados, acciones
incoherentes y un desarrollo en el que las propias reglas del universo cambian
constantemente. Además, parece escrito a retazos, sin mantener un tono uniforme
o un detalle constante. La única explicación que le veo es que se trate del
guión piloto de la serie The Strain, posteriormente remozado para publicar en forma de
libro, sacando así más rentabilidad a la franquicia y al nombre
importante que hay en la portada. Totalmente a evitar.
Eso
es todo por hoy. Mañana más, a ver qué películas me han gustado en 2019.
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