Sábado por la noche, esta
diluviando y el viento amenaza con arrancar los postigos. Ideal para darle a
una de terror/acción armado con un buen bol de palomitas, ¿no? Pongo El cuervo, perfecto. Empieza la
película… ¿Qué son estos títulos de crédito? Ah, vaya, voy he puesto una
película de 1963….(no es la primera vez que me pasa esto, grrr….). Bueno,
quería ver una peli…
La historia está libremente
inspirada en el conocidísimo poema de El
cuervo de Edgar Allan Poe. Un hombre disfruta de un vino en soledad, lee
poesía en una noche de tormenta mientras lamenta la muerte de su amada Leonor. Un
cuervo entra por la ventana y habla, declarando estar bajo un hechizo. A partir
de aquí, empieza una sorprendente disputa por el alma de Leonor.
ACTORES: Oye, están todos los
grandes del terror de los cincuenta. No falta ni uno. Dos colosos como Vincent
Prince y Boris Karloff son para tener en cuenta. El elenco femenino cumple para
suministrar la dosis de carne requerida sin desentonar, y entre los secundarios
destaca un jovencísimo Jack Nicholson en uno de sus primeros papeles en la
pantalla.
DIRECTOR: La adaptación de El cuervo es ciertamente modesta, pero
esto no le impide estar realizada con corrección. Sin complicarse la vida,
propone una ambientación sencilla y efectiva, con una música acorde a la época
y al tema. Los artesanales efectos especiales son prueba de su modestia,
pero están bien integrados en la historia y se hacen simpáticos. Aunque en un
primer momento tiene un toque inquietante, la película coge rápidamente un tono
de comedia muy agradecido que permite su disfrute con facilidad.
GUIÓN: Parece sorprendente como,
partiendo de un poema tenebroso, se llegue a una comedia de terror bastante
redonda. El juego de anacronismos que se propone, junto con los extraños giros
de guión para desarrollar la historia le dan mucha frescura y un toque de
imprevisibilidad inusual. No destaca por la profundidad de sus diálogos ni de
sus personajes, pero su desarrollo tiene la agilidad suficiente para moverse
con facilidad y dejarte con una sonrisa condescendiente en los labios.
La película descoloca, sin duda.
A su manera es un homenaje/parodia de las películas de terror de la época, pues
encontramos a un buen puñado de actores míticos en las mismas. Tomada como tal,
se convierte en un apetecible entretenimiento, muy naif y realizado con mucho
cariño, sin duda.
Nota: 6
Nota filmaffinity: 6.4
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