Estoy echando un repaso al carnaval demoníaco de American Horror History, disfrutando y sufriendo con la suerte de sus histriónicos personajes. Entre capítulo y capítulo recordé que hace unos años la gran productora de la HBO ya nos había trastornado con las extrañas aventuras de un circo tenebroso y extraño. Este Carnivale de los años 20 supone otra de sus joyas truncadas, de sus grandes series que padecen un final abrupto e inesperado (aunque satisfactorio) por cuestiones de producción. Dejémonos arrastrar por el malsano embiente de este circo ambulante...
La confusión se apodera de nosotros tan pronto entramos en la carpa del
circo. ¿Dónde están los buenos de la historia? ¿Los hay? ¿Quién de todos los
siniestros artistas que pueblan la caravana es el servidor del diablo? ¿Cuál es
la relación entre el circo y el fanático predicador que ha creado una nueva
Iglesia de Salvación? ¿Qué secretos oculta el vagón del director? Enigmas,
intrigas, preguntas y apenas dos temporadas para atraparte en las oscuras redes
del Infierno…
Carnivale despide malignidad con una naturalidad pasmosa, esta oscura
fantasía constituye un viaje a través de una siniestra América, envolviéndote
en un escenario maravilloso tanto en aspecto como en trasfondo. Un show con una
producción que se sale de la escala. La puesta en escena, los efectos, los
vestidos de época, los coches antiguos… La visión del carnaval y la ominosa
decadencia de la América pre-crack de los años 30. Por si fuera poco, las
actuaciones son estupendas, los guiones, cuidadísimos, con un gusto exquisito
por la mística y la intriga como pocas veces encontramos. El nivel de detalle
de cada escena corta la respiración y está al alcance de pocas producciones del
más lujoso Hollywood. Lamentablemente, esta abrumadora calidad acabó suponiendo
la principal razón de su precipitado fin: estas cosas son caras, muy caras. Vamos,
¡es que incluso la secuencia del título fue la más cara nunca hecha en una
serie yanqui!
Si su primera temporada ya te sumerge en un viaje irreal, su desenlace es
aún mejor, de los que se te queda grabado, mezclando influencias de David Lynch
y Stephen King en una noria surreal. Su cancelación es especialmente
frustrante, porque lo que podría haber sido una obra épica única en televisión
nos deja con las ganas de algo mucho mayor. La HBO se jugó mucho con Carnivale,
lástima que no saliera tan rentable como quisieran…
Estaba pensada para durar seis temporadas, con arcos argumentales que se
alargarían dos de ellas, como un libro por capítulos en una trama general.
Lamentablemente, sólo disfrutamos del primer capítulo. La audiencia no estaba
preparada para una dosis de belleza y de enigma como la que propone Carnivale.
Arrasó en los Emmys cuando estuvo en emisión y es, definitivamente, una de las
grandes. Es la típica historia de lucha entre el bien y el mal. Y aun así no es
típica, es única.
Nota : 9 y 9
Nota filmaffinity : 7.8
No hay comentarios:
Publicar un comentario