lunes, 23 de abril de 2012

Los hijos de Húrin (JRR Tolkien)


Título: Los hijos de Húrin
Autor: J. R. R. Tolkien
Título original: Narn i Chîn Húrin (La historia de los hijos de Húrin)


Los hijos de Húrin es uno de los grandes relatos que fundamentan la historia de la Tierra Media y se sitúa en la Primera Edad, cuando elfos, hombres y enanos llevaban unos pocos siglos sobre la tierra. Junto con los amores de Beren y Lúthien, es la historia más mencinada en El Señor de los Anillos y en El Silmarillion como referente del heroísmo y la tragedia en la lucha contra el Mal en la Primera Edad, encarnado en la figura de Morgoth. Una historia trágica de amores imposibles, pasiones incomprendidas y guerras sin cuartel entre la Luz y la Oscuridad. Hombres, elfos, enanos, orcos y dragones luchan por el domino de la Tierra Media.”

La historia nos sitúa en la Primera Edad, muchos muchos años antes de El Señor de los Anillos, cuando Morgoth aún está en la Tierra Media, los humanos acaban de aparecer y Bárbol el Ent es apenas un retoño. Húrin es el más valiente de los humanos vivos, pero es capturado y torturado por Morgoth. Como Húrin no sucumbe al dolor y a la desesperación, Morgoth decide maldecir su estirpe, provocando que les persiga la fatalidad y el infortunio, obligando así a Húrin a contemplar la historia de sus hijos.

Este libro era uno de los que iba a formar parte originalmente del Quenta Silmarillion, pero Tolkien decidió dejarlo de lado cuando empezó a trabajar en El Señor de los Anillos. Dejó la historia (que en un principio iba a ser un poema épico de unos 40.000 versos) a medias y la olvidó durante años. Tiempo después, ya anciano retomó la historia y la reescribió en prosa, añadiendo partes, quitando otras… Pero no llegó a acabarla antes de morir, quedando en suspenso.
Tras su muerte, Christopher Tolkien (hijo de), empezó a rebuscar entre los apuntes y demás cosas inacabadas que había dejado su padre y, haciendo trabajo de “editor” publicó algunas historias que no quedaron del todo acabadas, como fueron La Traición de Isengard, Los Cuentos Inconclusos o la más reciente Los hijos de Húrin. En estos libros póstumos se ha discutido mucho cuanto de Christopher -¿Qué quedo escrito y cuánto es inventado?- hay en cada una de las historias, que son más bien irregulares. Por suerte, en ésta Tolkien padre dejó bastante trabajo hecho y, en la parte no definitiva, había dejado indicado punto por punto lo que debía pasar, por lo que el resultado es altamente satisfactorio.

Para este libro ya quedó mucho escrito, por lo que no se notan muchos saltos de calidad y de estilo a lo largo de su narración (hay una cierta elipsis que denota alguna parte que quedó sin acabar originalmente, cosa que confirman en la nota del autor). En los Hijos de Húrin se puede encontrar ese magnífico tono lírico y místico de las grandes historias que hay en el Silmarillion (no olvidemos que originalmente, iba a estar incluido en el compendio), con los toques épicos que se esperan de Tolkien. Por otro lado, el relato es mucho más corto de lo habitual en Tolkien y se puede aducir que la historia es “menor” comparado con la Gran Historia que hay alrededor.

El personaje sobre el que gira la historia es Turín, hijo de Húrin. Es un soberbio luchador, tal como fue su padre, pero tiene la mala suerte de atraer la desgracia allá donde pasa. Gracias a sus cualidades de liderazgo y su enorme carisma, asciende a los puestos de mando en cada lugar que le acoge, para a continuación caer víctima de la desdicha y el infortunio, preso de su destino. Realiza grandes esfuerzos para esquivar su hado, pero son justamente esos esfuerzos los que le llevan a cumplir con él, conformando así una tragedia muy bien trenzada.

La otra hija de Húrin es Nërwen, que se queda con su madre mientras su hermano va a la guerra. Debe sufrir pacientemente todas las desdichas de su hermano, mientras emigra de un lugar a otro, huyendo de cada una de las batallas. Es el ejemplo de personaje inválido y sufridor. Su destino le impone contemplar con dolor cómo va perdiendo a todos sus seres queridos. Trágico (y bellamente tratado).

No es un libro que recomendaría para empezar con el autor, ya que el relato necesita de una cierta cantidad de conocimientos del universo de la Tierra Media para poder ser apreciado correctamente y no sentirse perdido. (La idea sería empezar por El Hobbit y, si te gusta, ir a por el Señor de los Anillos y El Silmarillion, dejando el resto para quién quiera profundizar en las mágicas historias de la Tierra Media). Es totalmente un libro para fans de Tolkien que encontrarán en él toda la magia de los Grandes Relatos con una historia trágica de guerra y pérdida.

Nota: 6

domingo, 22 de abril de 2012

Al final del Camino


Que sí, es una comedia ligera, con los dos actores de moda en las series españolas y esas cosas… Tiene sus chistes, alguna media gracia buena, pero poco más. Tampoco es que se haga cargante, por suerte.

Nacho y Pilar son dos personas que, aunque apenas se conocen, ya se odian. Cada uno de ellos arrastra un pasado amoroso bastante tortuoso y, por cuestiones laborales, se ven obligados a simular ser pareja durante un reportaje a lo largo del Camino de Santiago. Un puñado de personajes a cada cual mas extraño y excéntrico les acompañarán en el trayecto.

A pesar del cambio de aires y de personajes, la película no deja otra impresión de estar viendo un capítulo alargado de Aquí no hay quién viva. Mismos chistes, mismos personajes y una historia inverosímil y forzada. Se copia el formato de las comedias románticas yanquis, pero al modo castizo y manteniendo la estupidez por bandera.

ACTORES: Excepto Tejero y Alterio, el resto nulos. Los protagonistas se benefician de la indudable química que hay entre ellos para dar un poco de gracia a un guión y unos personajes que no tienen ninguna. Se agradece que conviertan una película infumable en algo simplemente pasable.

DIRECTOR: Vale, Roberto Santiago no es Almodóvar, ni Amenabar, Quereteja o Bollaín, pero su historial de comedietas tontas y malas ya hace imaginar que clase de película vamos a ver. Lo único que parece preocuparle es que Tejero&Alterio recuerden lo más posible a su conocido papel mientras te enseña algunas de las “estaciones de descanso” más bonitas del Camino (que habrá pagado lo suyo, viendo la de paisajes preciosos que meten por medio). La historia tiene muy poco fuelle y Santiago no se molesta mucho en darle un mínimo de fuerza. No hay imágenes ni diálogos divertidos, todo se fía a la comicidad personal de la pareja protagonista, que hace lo que puede para salvar el desastre.

GUIÓN: Bueno, partiendo de que lo que se pretende es meter unos cuantos gags (casi todos sexuales) en una historia inverosímil para así enseñarte lo mucho que se liga en el Camino y los paisajes tan bonitos que veras… Pues es esperable que abunden los diálogos sin sentido, las reacciones incoherentes y estupideces varias. Hay algún gag resultón, pero el resto -con suerte- consiguen hacerte poner media sonrisa. Suerte que Tejero&Alterio tienen buena química y “se inventan” algún chiste por medio, que si no…

En resumen, una mediocre comedia romántica hecha con pocas ganas, para resultar baratita y cumplidora.  Si los yanquis pueden hacer películas de relleno, en España también.

Nota: 3
Nota filmaffinity: 4.8

viernes, 20 de abril de 2012

Transformers 2: La venganza de los caídos


La primera parte de esta saga era un entretenimiento tonto, con buenos efectos especiales y una historia algo peregrina, pero simpática. En esta segunda parte han dejado a Michael Bay libertad absoluta para hacer lo que le de la gana, y a buen seguro que lo ha hecho.

Pasados dos años de la anterior película, Sam ha vuelto a su vida normal y empieza a ir a la universidad. La aparición de una nueva oleada de Decepticons que quiere dominar el planeta Tierra provocará que los Autobots se vuelvan a poner en marcha para defender a los humanos y, cómo no, Sam estará en medio de todo el percal.

La película es puro exceso. Cada escena es grandilocuente, busca la explosión máxima, un cambio de cámara vertiginoso y mareante y las localizaciones más exclusivas posibles. El problema es que tanto exceso acaba saturando y la película pierde sentido.

ACTORES: Tanto Shia LaBeouf como Megan Fox son meros actores florero. Malos y vagos, no hacen otra cosa que lucir palmito. Los verdades actores de la película son los Transformers y se nota en las actuaciones.

DIRECTOR: Michael Bay es un adicto al espectáculo y los fuegos artficiales. Promete eso y da eso, y mucho. Nunca ha sido bueno contando historias, pero es que en ésta ni se molesta en ello. Busca una excusa para ir de lado a lado del mundo y intentar deslumbrar con explosiones y efectos especiales. Nadie duda que los FX son buenos (muy buenos) y espectaculares. Desmadrados, llevados a extremos esperpénticos y mareantes. Lo que vas a ver son autobots o decepticons en todo su esplendor, marines, aviones, coches, portaaviones, tanques y todo el arsenal armamentístico yanki. Una y otra vez dudas de si estas viendo una lucha entre robots o un cubo de TENTE gigante en un furioso cocktail agitado a ritmo de disco. Si eso es lo que se busca, sirve. Hay acción sin sentido y sin descanso, pero muchas veces uno busca algo más que eso. ¿O alguien duda que la escena de Shangai es totalmente innecesaria y sólo busca destruir la ciudad porque sí? (bueno, toda la película es eso, básicamente).

GUIÓN: Básicamente no tiene un guión como tal. La película es toda una excusa para el exceso y la desproporción. Los personajes son inexistentes, la excusa para hacerles viajar por todo el mundo es más que nula, la coherencia brilla por su ausencia y los diálogos, perfectos ejemplos de cómo no se deben hacer. Esta ausencia de historia se disimula durante las dos primeras horas con una exhuberancia de FX, pero la escena final en el desierto se hace horriblemente eterna, ya que la batalla dura 45 minutos prácticamente todos en cámara lenta, y además, apenas hay una escena interesante o con sentido.

Quizás con un poco menos de excesos y 1 hora menos de metraje la película hubiera dejado un poco de mejor sabor de boca, pero tanto exceso acaba por saturar.

Está claro que Michael Bay le gusta...

- Petar cosas
- El ejército americano y todo su parque movil
- Mostrar a Megan Fox luciendo palmito
- Petar más cosas
- La cámara lenta
- Los montajes rápidos estilo videoclip donde no te enteras ni del no-do
-¿He dicho ya que le gusta petar cosas?

A Michael Bay no le gusta...
- Las películas con guion (¿Para que historia pudiendo petar cosas?)
- Los diálogos (¡Para que hablar si podemos petar cosas!)
- Obama (El cobarde se esconde mientras atacan los Decepticons y encima su enlace es un tocapelotas, menos mal que está el ejercito...)
- La sobriedad
- Cualquier cosa que huela a cine de verdad...

Si vas a ver alguna de sus películas, ya sabes a lo que te atienes. A veces eso basta, pero en esta además se desborda por todos lados y nos monta casi tres horas de explosiones, giros rocambolescos de cámara, más explosiones, edificios arrasados, todavía más explosiones, vehículos volando, más explosiones aún y ninguna historia que contar. Teniendo en cuenta todo el dineral gastado en producir, realizar y montar toda esta cantidad de efectos, ¿no habría sido mejor reducir media hora en la duración final y, con ese dinero ahorrado, pagar a un buen guionista para que, al menos, el resultado final fuera el de una película entretenida?

Nota: 2
Nota filmaffinity: 5.3

La película se llevó dos nominaciones a los Oscars a mejor sonido y mejores efectos especiales. Si es que tanto exceso también tiene su premio. Se llevó 3 Razzies a peor película, director y guión. Con todo merecimiento.

Un pequeño detalle, muestra de mi aburrimiento. La pirámide por la que escalan los transformers (alguno de los cuales muestra sus pudendas en un gag que también podían haber sustituido por Megan Fox corriendo), es la de Kefrén (que conserva el revestimiento en la punta). Cuando el Turturro habla desde esta pirámide, se ve de fondo.... la misma pirámide. Mi teoría es que la de Kheops tenía derechos de imagen.

Otra reflexión egipcia: es duro comprobar lo mal que le viene a Holywood que las pirámides de Giza y el templo de Karnak estén a
500 kilómetros. (Esto no es una crítica, la ficción es la ficción, es pura pedantería).

martes, 17 de abril de 2012

El amo del tiempo (Francisco Escobar Olivas)


Título: El amo del tiempo
Autor: Francisco Escobar Olivas

“Albores del siglo XX. En un mundo rural enterrado entre montañas, Nicanor descubre que puede convertirse, a pesar de sus propias taras y las de la sociedad que lo encasilla, en el amo del tiempo.”


Estamos en un pequeño pueblo en el que nunca pasa nada. Todo el mundo parece tener prefijado su destino al nacer: el rico cacique manda y dispone, el alcalde permite los trapicheos a cambio de su parte, el maestro intenta enseñar unos rudimientos de educación a los pequeños, el cura educa para la obediencia y los pobres acatan y sufren mientras el guardia civil se preocupa de que nadie se salga del redil.

El protagonista de la historia es Nicanor, nacido de familia pobre y con un retraso que le impide comunicarse correctamente con los demás. Debido a ello recibe el sambenito de tonto (o loco) del pueblo y las burlas y odios de todo el mundo. Sin embargo, Nicanor es inteligente y, en la medida de sus posibilidades, intenta escapar de su destino, consiguiendo llegar a encargarse del mantenimiento del reloj del pueblo, aunque nadie le trate con un mínimo de respeto. Allí descubrirá que, de vez en cuando, tiene la capacidad de detener el tiempo, cosa que aprovechará en su beneficio.

La otra persona que intenta rebelarse contra su destino es María Pulido, la hija del cacique. Atea e instruida, no desea otra cosa que vivir tranquila a su aire, pero como hija de familia bien, no tiene más remedio que conformarse con un matrimonio de conveniencia sin rastro de amor, que la convierte en una paridora de hijos y un mueble que adorna la casa.

Usando de una manera muy original los relojes y el tiempo como leit motiv de la historia, somos testigos de la infancia de los dos protagonistas y de su paso a la adultez, que trae la aparición de las capacidades de Nicanor. Mientras tanto, parecen avecinarse tiempos de cambios, pues el cacique local desea dar un último golpe de mano que le asegure la supremacía total en el pueblo.

Este libro me ha hecho recordar en muchos momentos -especialmente al inicio- como era la vida en los pequeños pueblos de Castilla, siempre tan tediosa y rutinaria, casi detenida. Mi abuelo no deja de contarnos pequeñas anécdotas y pequeñas historias de sus tiempos mozos y sus travesuras y no he podido evitar enternecerme recordando sus graciosas chanzas y lo bien representadas que las he visto en el libro. (Gracias)

Es una novela rural, muy bucólica, con unos personajes muy bien descritos y unos toques de realismo mágico muy frescos que encajan muy bien con esa obsesión por los relojes de varios personajes. El lenguaje utilizado es muy lírico, con una abundancia de adjetivos casi abrumadora y un vocabulario muy “de pueblo” que contribuye positivamente a dar ese ambiente bucólico que demanda la novela. El mayor problema (que no defecto) que hay en la novela es su exagerada plétora de elipsis que puede provocar alguna ligera confusión en algunos momentos y que obliga a leer con atención para no ver saltos de calles a chimeneas en apenas una línea.

Siempre es agradable ver a nuevos pequeños autores que, aunque desconocidos para el gran público, saben deleitarnos, desde su modestia, con historias interesantes y bien contadas.

Nota: 8

domingo, 15 de abril de 2012

La gran aventura de Winter el delfín


Hoy parece que toca una película infantil, de las de ver con los más pequeños.

Un chico solitario y marginado en el colegio encuentra a un delfín varado en la playa. El delfín es llevado a un centro marino, dónde se le debe amputar la cola para permitirle sobrevivir. El delfín no puede nadar sin su cola, pero con la ayuda del chico y los demás voluntarios del centro, saldrá adelante.

Como se puede deducir fácilmente, es una película de autosuperación con niño, para niños. Es un típico telefilm de amistad niño-animal, con los toques ecologistas y moralizantes pertinentes, al que se agradece que no abuse de edulcorante y mantenga una propuesta inesperadamente sólida y honesta.

ACTORES: A pesar de contar con dos actores conocidos como Ashley Judd y Morgan Freeman, el peso corre a cargo de los niños Gamble y Zuehlsdorff, los cuales ponen mucha ilusión y hacen un par de papeles poco cargantes y muy creíbles. El resto de actores hacen de adultos en película de niños, por lo que tampoco les vamos a exigir demasiado.

DIRECTOR: Dentro de la ya larga carrera de Charles Martin en el cine infantil, estamos ante la que es su película más redonda. Va directo a lo que funciona y no intenta imposibles. Como en toda película infantil, muchas dosis de buenrollismo, optimismo y esfuerzo con recompensa, pero sin buscar efectismos (hay un par de momentos para buscar la lágrima fácil y la esquiva correctamente) ni situaciones ridículas.

GUIÓN: Basándose en una historia real, uno podía esperar cualquier esperpento, pero te encuentras con una historia coherente, que trata al espectador (niño) con respeto y no busca la lágrima fácil en ningún momento. Su historia es bien simple (niño cuida animalito enfermo y la gente lo ayuda), pero no cae en estupideces ni incoherencias y valoro positivamente que se cambie aunque sea minimamente la estructura de "problema inicial - mejoría - bajón - explosión final" por una constante sucesión de caidas de las que hay que levantarse y reponerse a cada momento y que además ofrece las esperadas moralejas de superación, de no rendirse nunca, etc. Los personajes de la película son simples, pero no estúpidos, como sería normal en cualquier propuesta para niños en que los adultos son “los malos”.

En resumen, una entretenida película de animal-marino-ecologista para los más pequeños, con una historia correcta y unas dosis de ternura adecuadas. Si tienes un niño de 6-10 años, seguro que le encantará como ya funcionaron Liberad a Willy o Flipper. (Adultos sin niños, quizás mejor abstenerse).

Nota: 5
Nota filmaffinity: 6.3

sábado, 14 de abril de 2012

Neuromante (William Gibson)


Título: Neuromante
Autor: William Gibson
Título original: Neuromancer

“En un futuro invadido por microprocesadores, en el que la información es la materia prima. Vaqueros como Henry Dorrett Case se ganan la vida hurtando información, traspasando defensas electrónicas, bloques tangibles y luminosos, como rascacielos geométricos. En este espeluznante y sombrío futuro la mayor parte del este de Norteamérica es una única y gigantesca ciudad, casi toda Europa un vertedero atómico y Japón una jungla de neón, corruptora y brillante, donde una persona es la suma de sus vicios.”

Una novela que gana los premios Hugo, Nebula y el Philip K. Dick el mismo año no puede ser un mal libro. Para nada.

Neuromante nos sitúa en un mundo futuro en que la tecnología ha llegado a unos límites insospechados. Esto no ha provocado un desarrollo social, al contrario, los niveles de decadencia y corrupción en la sociedad sobrepasan cualquier medida. Esta distopía es una de las obras modernas más influyentes en la ciencia-ficción. Además de ser prácticamente la inauguradora del género del Cyber-punk, sorprende y cautiva por la vertiginosa verosimilitud de la pervertida y decadente sociedad que se nos presenta.

La sociedad que vemos es decadente, corrupta y horrible. Debo reconocer que el autor debe de estar realmente muy mal de la cabeza para engendrar un mundo tan delirantemente enfermizo, vertiginoso y perverso. Como muestra:

“Cualquier cosa que se le pueda hacer a una rata se le puede hacer a un humano. Y podemos hacer casi cualquier cosa a las ratas. Es duro pensar en esto, pero es la verdad. Esto no cambiará con cubrirnos los ojos.” - El finlandés

Es realmente un libro que impacta. Te puede gustar más o menos el género, pero en absoluto deja indiferente a nadie. Su influencia en gran parte de la ciencia-ficción posterior es ampliamente destacable, pues clásicos como Blade Runner, Matrix o casi toda la imaginería del WH40k provienen de este degenerado universo creado por Gibson.

La historia nos atrapa con el vaquero -persona con capacidad para “cabalgar” en el ciberespacio- Case. Malvive en una espiral autodestructiva de drogas y vicio ya que ha perdido la capacidad de conectarse al ciberespacio -fue envenenado- y, con ello, su único medio de vida. No desea otra cosa que tener un poco de paz, pero los traumas del pasado y la inexistencia de un ancla o un asidero lo han llevado hacia una huida sin control a ninguna parte.
Es curado y reclutado por Armitage, un exmarine que apenas tiene sentimientos y esconde un extraño pasado, para cumplir una misión suicida de oscuros propósitos.
En el equipo también se encuentra la combatiente Molly, una joven con abundantes modificaciones cibernéticas en su cuerpo que la convierten en una máquina de matar muy efectiva. Su personalidad bromista y perversamente juguetona la convierten en un ser que disfruta atormentando con malvada picardía los seres que hay a su alrededor -si es que una belleza con cuchillas puede ser muy peligrosa…-
Y finalmente, Peter Riviera es quién completa el grupo. Es un psicópata adicto a todo tipo de drogas, un sádico sexual y homicida que tiene la capacidad de alterar lo que perciben los sentidos de la gente a su alrededor -“¿Qué es real, Neo?”-. Su capacidad le permite infiltrarse en cualquier lugar, siempre y cuando alguien pueda mantener a raya sus perversiones sexuales y sus frecuentes viajes alucinógenos.

En medio de una vertiginosa historia de acción en que nuestro “héroe” se ve obligado a hacer mil barbaridades para salvar el pellejo, el autor tiene tiempo de reflexionar sobre el futuro de la humanidad -la radiografía de nuestra decadente sociedad es cruel y certera- y sobre la preocupación del desarrollo de la inteligencia artificial hasta el extremo, dónde ésta se vuelve autoconsciente y desea aprender y “vivir”.

Una novela indispensable que retrata lo peor del ser humano mientras muestra el mundo bajo el dominio del sistema como un lugar oscuro y siniestro, dónde las redes de cómputo dominan cada aspecto de la vida. Gigantes corporaciones multinacionales reemplazan a los gobiernos como centros del poder político, económico y militar. La batalla entre un personaje marginado contra un sistema totalitario sirve de armazón para una historia que impacta y, seguro, no deja indiferente.

Nota: 9

viernes, 13 de abril de 2012

Soy el Número 4


A ver, ¿qué pasa si juntas Crepúsculo con alguna película de Michael Bay? Pues que te sale un engendro como éste. (bueno, la película es una chorrada pero es mejor de lo que parece en un principio)


Cuatro es uno de los últimos supervivientes de una raza alienígena que se esconde en la Tierra. Dedica su existencia a pasar desapercibido, pues sus enemigos han acabado con tres de sus compañeros y él sabe que es el siguiente. Acaba en el recóndito pueblo de Paradise, dónde se enamora de Sara. Allí comprende que ya no va a poder huir más y luchará contra sus perseguidores.

El argumento es simple y previsible, aunque el hecho de que lo sea no supone ningún problema, ya que la película no engaña a nadie ni busca ser más de lo que es. Se plantea como una película que tiene acción -abundante, pero para todos los públicos- junto con un romance adolescente muy correcto y casto. Las pautas están marcadas al dedillo y la película las sigue, sin saltarse nada. Ni trucos baratos, ni intentos de sorprender, ni giros de guión; que si los efectismos no se hacen bien quedan muy mal y a veces es mejor no complicarse la vida.

La película bebe mucho más de Smallville que de Crepúsculo, siguiendo las aventuras de un joven extraterrestre súperpoderoso con problemas de amoríos. La historia está basada en una saga de libros juveniles (que se han publicado 2 de 6, por ahora) que los gurús de Hollywood han intentado pasar a película viendo el éxito reciente de este tipo de sagas. Por lo que tengo entendido, las novelas son relativamente apreciables, aunque seguro que se habrán saltado muchas cosas en la adaptación. Se ha realizado por poco dinero y ha recaudado una cantidad decente, pero probablemente quede colgada como otras sagas (Eragon, Airbender, La brújula dorada). En comparación con estas últimas es de reconocer que la película es autoconclusiva, entretenida y agradable en su modestia.

ACTORES: Correctos. El guión no les exige un gran esfuerzo, pero tampoco se muestran pasotistas. Las interpretaciones no son la prioridad, pero los actores cumplen y se muestran medianamente creíbles.

DIRECTOR: Caruso ya tiene un cierto bagaje en la dirección de películas de acción, aunque ha tocado casi todos los géneros con propuestas medianamente aceptables. Una vez el planteamiento se ha dispuesto -correctamente, a pesar del despropósito de la historia- el director sabe mantener la poca enjundia de la trama mediante un ritmo entretenido y la supresión de cualquier escena edulcorada más allá de las obligatorias. Cumpliendo con todas las normas de las películas de acción, las luchas están bien introducidas dentro de las historias. Las coreografías de batalla son amenas y los efectos especiales están bien conseguidos, con un cierto aroma a añejo y artesanal que siempre me resulta atractivo.

GUIÓN: La historia que se nos ofrece es del todo menos original, pero cumple para entretener y los personajes están bien definidos. Sorprendentemente, mantienen un tipo de personalidad definido, -bueno, los malos, no- lo cual es inusual en una propuesta de este estilo. La trama está aceptablemente trenzada y sirve de mínimo armazón para la película. Los momentos románticos contienen un exceso de azúcar, pero no abundan y, están correctamente distribuidos a lo largo del metraje, sin forzar ni insultar al público. La duración (92 minutos) está adecuadamente adaptada a la (poca) fuerza de la historia y el sprint final deja un sabor de boca agradable.

La película, sin ser nada del otro mundo, no pretende hacer otra cosa que entretener, molestándose en crear una historia con algo de sentido para darle un mínimo empaque al asunto. Film chorra de acción para todos los públicos realizado con toques romanticotes que pueden echar atrás a muchos. Se nota una realización muy prefabricada, pero sin errores.

Nota: 5
Nota Filmaffinity: 5.0

SPOILER: ¿Realmente era necesaria tanta cantidad de escenas con el iPhone?

miércoles, 11 de abril de 2012

El planeta libre


Ésta es una película que busca hacer pensar y reflexionar sobre nuestra sociedad. Es una película minoritaria que pasó desapercibida en su momento y que, vía Internet, se va expandiendo. La reflexión que plantea no deja de ser interesante, pero la película es bastante deficiente en su factura.

En un planeta no muy alejado de la Tierra existe otra civilización humana. A pesar de no mostrar rastro de tecnificación, su civilización parece mucho más avanzada que la nuestra: sus habitantes viven 250 años, han eliminado la contaminación y viven en un régimen abierto, saludable, en el que todos parecen llevarse bien. De vez en cuando, van haciendo viajes interplanetarios, pero nadie quiere ir a la Tierra, foco de conflictos y contaminación. Este año, hay una sorpresa, pues Mila ha decidido ir a visitar cómo están los terrícolas. Allí observará que las cosas son muy diferentes de cómo ella está acostumbrada y que, aunque los humanos de la Tierra han evolucionado, las cosas no siempre van para bien.

Al ser una película que plantea algo más que un simple entretenimiento, analizaré primero desde un punto de vista técnico.

ACTORES: Dejémoslos en malos. La directora/guionista/actriz principal/responsable de la música se dirige a sí misma. Su personaje es del todo inverosímil y sobreactúa para intentar dar algo más de fuerza. El resto de actores no intenta hacer otra cosa que soltar sus frases.

DIRECTOR: Esta directora no busca entretener ni deslumbrar con calidad artística. Lo que pretende es lanzar un mensaje simplista y aleccionador, sin preocuparse de que se muestre de una manera bella ni que los personajes sean coherentes y menos que la película mantenga un cierto ritmo. No obstante, hay que reconocer que hay un par de escenas bien logradas, como la escena del fútbol o la clase de historia. En mi opinión, esta mujer no tiene malas ideas, pero luego se lía y apelotona al explicarlas provocando que la película no tenga ningún tipo de orden y coherencia.

GUIÓN: Esta es quizás la peor parte de la película. No hay evolución en el argumento ni hay nada parecido a una “introducción/nudo/desenlace”. Encontramos más bien una sucesión de gags -con poca gracia- que remarcan una y otra vez la misma moraleja, como si fuera una regañina continúa. Las ideas que plantea no están nada mal, pero el modo de llevarlo a cabo es francamente mejorable.

Nota: 3
Nota Filmaffinity: 7.1

Ahora, si me permitís, intentaré explayarme más sobre las ideas que intenta defender la película (abundancia de spoilers y referencias al argumento, por si queréis verla).

La idea principal de la película es “desnudar” todas las vergüenzas de nuestra sociedad: egoísmo, sobreexplotación ecológica, afán desmedido por el dinero, falta de comunicación… Una sociedad dónde nuestra idea de desarrollo nos ha remitido a un mundo individualista, mezquino, egoísta y consumista. Dónde actuamos como un reloj suizo, sin frenos, apresurados y en círculos. Dónde no nos detenemos, no pensamos, no agradecemos y no disfrutamos. Sólo caminamos, viviendo una vida impuesta, predeterminada, viciosa, productiva. De la casa al trabajo, y del trabajo a la casa. Cuando antes, mejor. 
El planteamiento no es malo, pero está muy mal llevado a cabo. El resultado es una especie de refrito de críticas sacadas de otras referencias que peca de pedantería y poca profundidad.

Analizando su mensaje, como ejemplo de sociedad futura -desde la que regañarnos- nos presenta un paradigma perfecto de humanidad “new age”. En esta sociedad todos son felices. Pero esto es simple apariencia. No se nos da apenas referencia del funcionamiento de esta sociedad aparte del mantra de “somos felices”, pero en algunos diálogos podemos vislumbrar que siguen existiendo problemas como el racismo, la lucha de clases y la aceptación del diferente -parece buscarse eliminar al diferente, asimilándolo y provocando que todos sean felices, iguales y contentos-.

Encontramos también una abundancia de incoherencias en las situaciones de la película:

 Un ser de una sociedad tan “avanzada” como dice ser, debería tener unas mínimas nociones de sociología y ser capaz de entender que en una sociedad diferente, hay normas que cambian.
-  Definen que el “desconectar” a una persona implica hacerle avanzar en la evolución. Esto ocurre exitosamente con el médico, que pasa de ser un engreído a poder reflexionar. Sin embargo, en el resto de casos, parece convertir a las personas en unos alelados bailarines sin seso.
-   En un primer momento remarcan que el “desconectar” a una persona es delicado y no debe hacerse más que en momentos de máxima necesidad. Como por ejemplo, estar aburrido en un concierto de música clásica o en un partido de fútbol (casi un problema de supervivencia, vamos).
-   La protagonista aduce no saber que es el trabajo, pero en cambio, odia a su jefe (?).
-   Se considera la música como un medio que produce incomunicación entre las personas (!) para a continuación hablar orgullosamente de Bach -como visitante de su planeta- para a seguido reventar un concierto de su música -que se transforma en jazz- por considerarlo rígido, para acabar transformando un partido de fútbol en el lago de los cisnes. Todo un ejemplo de continuidad.
-  En todo momento que se quiere criticar algún aspecto de la sociedad, el “criticado” reacciona a la situación planteada de la peor manera posible, siempre intolerante, irracional y exageradamente estúpido -no se puede negar que algún energúmeno hay, pero las reacciones de los personajes son absurdas cuanto menos-. Esto se puede ver en el caso de la iglesia, el accidente de tráfico o el robo del bebé.
(sólo por nombrar unas cuantas).

Como he dicho antes, aunque las ideas que plantea puedan ser acertadas e interesantes, la poca calidad al plasmarlas en movimiento reduce mucho el aprovechamiento de la película. Puestos a ver o leer criticas en el mismo sentido, se me ocurren propuestas muy superiores como pudieran ser Concursante, Tiempos modernos (películas) Un mundo feliz o  Ensayo sobre la ceguera (libros).  

Para acabar, un pequeño chascarrillo… el mundo “ideal” que se plantea en la película me recuerda mucho al de la canción de Imagine (es obvia la inspiración de la autora).

Imagine there's no heaven
It's easy if you try
No hell below us
Above us only sky
Imagine all the people living for today

Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people living life in peace

You, you may say
I'm a dreamer, but I'm not the only one
I hope some day you'll join us
And the world will be as one

Imagine no possessions
I wonder if you can
No need for greed or hunger
A brotherhood of man
Imagine all the people sharing all the world

You, you may say
I'm a dreamer, but I'm not the only one
I hope some day you'll join us

And the world will live as one

Poniéndome en modo Dios-Emperador, siempre he pensado que ese mundo sería el primero que invadiría. No lo verían llegar.



jueves, 5 de abril de 2012

El hombre sonriente (Henning Mankell)


Título: El hombre sonriente
Autor: Henning Mankell
Título original: Mannen som log 

“El abogado Gustaf Torstensson conduce inquiero su vehículo por una carretera solitaria. De repente, delante de él, ve una silla plantada en medio del asfalto, y en ella, un muñeco del tamaño de un ser humano. Torstensson frena en seco y, aterrado, sale del coche para ver la fantasmagórica aparición. Es lo último que hace en su vida. El inspector Wallander se sumergirá en un complicado caso de delincuencia económica, y la sensación de que su vida corre peligro no lo abandonará en toda la investigación.”

Nos encontramos con la cuarta novela de la saga Wallander (se pueden leer sueltas, ya que los libros no tienen mucho que ver unos con otros). Después de los hechos acaecidos en La leona blanca, Kurt Wallander ha caído en una fuerte depresión, circula de borrachera en borrachera y no desea otra cosa que jubilarse. La repentina muerte de Tortensson le obligará a olvidar sus traumas durante unos meses y enfrentarse de nuevo a la maldad del ser humano.

Como una buena novela negra, la trama se centra principalmente en la investigación que la Policía sueca lleva a cabo. Minuciosamente, vamos siguiendo todos los pasos y avances de la misma. La policía científica tiene mucha importancia y resulta muy curioso ver cómo, en unos pocos años, la sociedad y la investigación ha cambiado tanto: la novela está escrita en 1993 -hace nada- y aún no hay Internet ni teléfonos móviles, los ordenadores están empezando a dar el salto, pero todo se hace manualmente -la novela transcurre en el momento en que se empiezan a digitalizar los primeras cosas, con el consiguiente caos de documentos-, vamos, sin ninguna floritura tipo CSI…
Desde un primer momento queda claro quién es el asesino pero la gracia del libro estriba en seguir la investigación para poder culpabilizarlo. Paso a paso, el grupo va avanzando y encontrando prueba tras prueba. Mientras tanto, el asesino dará muestras de unas buenas dosis de mala uva e irá intentando detener la investigación de manera bastante expeditiva -y con mucho humor negro-.

El protagonista de toda la acción es el carismático Kurt Wallander que se muestra muy humano y creíble. Es imposible no encariñarse con él, ya que rebosa vida y nunca nos defrauda. Es, ante todo, una persona real, de las que te podrías encontrar cualquier día. Dedicado y obcecado, intenta siempre llevar a cabo las decisiones correctas mientras contempla horrorizado la capacidad del ser humano para causar el mal a sus semejantes.

Del resto de personajes que ayudan a Wallander, llama especialmente la atención la aparición de Ann-Britt Höglund, que es la primera mujer policía de la pequeña comisaría de Ystad. Novata, pero brillante y aguda, lucha por hacerse un hueco, ya que en el cerrado ambiente de la comisaría flota la idea de que al ser mujer se es peor policía que los demás. Una buena inclusión de un personaje femenino, con un toquecito de denuncia bien puesto. Además, me agrada la idea de que pueda ser amiga de Wallander sin que en ningún momento se de pie a que pueda pasar algo más, cosa algo inusual en las historias.

En este libro encontramos todos los elementos de una excelente novela negra: un caso turbio y con multitud de ramificaciones, un policia carismático, una atmósfera opresiva y una investigación bien llevada. Todo esto, unido a un estilo fácil y ameno, es un cóctel ideal para crear una absorbente novela bien entretenida que hará las delicias de todo amante del género.

Nota: 8

miércoles, 4 de abril de 2012

A ciegas


Adaptar en una película un libro de un autor tan difícil como Saramago es toda una osadía, pero Meirelles no es un cualquiera y consigue hacer una película estimable.

En una ciudad cualquiera de un país cualquiera, un hombre anónimo se queda ciego. Aparentemente, no hay nada que pueda haber provocado este hecho: sus ojos están bien, no tiene ninguna enfermedad ni tampoco ha tenido un accidente. Simplemente una niebla blanca ha cubierto su visión. A medida que transcurren las horas, más gente va perdiendo la vista. Al parecer algo contagioso y sin cura, el Gobierno decide encerrar a todos los enfermos en una cárcel para aislarlos hasta que se encuentre una cura, tratándolos como apestados. Una mujer con la capacidad de ver decide seguir a su marido en esa cárcel, dónde es testigo de todas las vejaciones que deben soportar los enfermos mientras intenta aportarles algo de luz y esperanza a aquellos hombres que no ven.

El texto de Saramago tiene bastantes lecturas y trata muchas cosas: una crítica a la actuación de los Gobiernos ante lo desconocido, la facilidad para el desarrollo del fascismo, la reafirmación del homo homini lupus, la imposibilidad de una persona anónima de llevar el bien a toda la humanidad pero la capacidad de traerlo en un pequeño grupo de personas, la gente que no ve la realidad que le rodea aunque pueda ver, el compañerismo como modo de supervivencia, la esperanza…
Obviamente, la adaptación de Meirelles no puede llegar a tener esta profundidad, centrándose en el tema de la destrucción de la sociedad y la canibalización del hombre hacía sus semejantes. Partiendo de un hecho inexplicable e insólito que, obviamente, parte la sociedad en mil pedazos, ambos autores componen un retrato de la barbarie creada al propagarse el terror.

ACTORES: Meirelles se rodea de un elenco muy cosmopolita con la intención de remarcar que todos formamos parte de esta peligrosa especie que es el ser humano. Desde las actuaciones indudablemente se destaca la suficiencia de Julianne Moore que le da mucha convicción y le hace ganar unos puntos a la película. Mark Ruffalo y Gael García Bernal secundan bastante bien el protagónico de la actriz antes mencionada. Alice Braga (mas bien sus senos) aporta la cuota sensual a la cinta. Y Danny Glover compone un personaje muy poco relevante en el guión como para evaluarlo.

DIRECTOR: Después de las magníficas Ciudad de Dios y El jardinero fiel, ya quedó claro que Meirelles no tiene una gran fe en la especie humana. En esta película nos muestra que pocos son capaces de retratar la miseria como él, ya que la ambientación del film y su fotografía consiguen envolver al espectador en un universo opresivo, desagradable e incluso tétrico, un entorno apocalíptico que sólo el hombre es capaz de crear. Al poner en imágenes lo que apenas habíamos conseguido atisbar en Ensayo sobre la ceguera, lo que es en planteamiento un drama se torna un espectáculo dantesco y horrible, que nos ataca y nos recuerda lo dañina que puede ser la especie humana. El tratamiento de las imágenes desprende muchos toques oníricos, realizados con el toque frío y deshumanizado de Meirelles. Imágenes poderosas para un mensaje desasosegante al que se le puede achacar que no ahonda en muchos de los temas del libro, centrándose simplemente en los más sociales-que son los que le importan a Meirelles-. Lo dantesco de sus imágenes y la -quizás- innecesaria lentitud de la película puede lastrar el visionado para algunos.

GUIÓN: La película discurre lentamente y ahorra en explicaciones. No sabemos por qué llega la ceguera ni qué la causa, por lo que aquellos que buscan razonamientos o lógica, se quedarán sin ella. La trama se centra en tres puntos: la aparición de la ceguera y las primeras reacciones de pánico, el encierro de los ciegos en la cárcel y su organización social y, finalmente, la fuga de la cárcel de unos pocos afortunados. La crítica hacia la sociedad y al ser humano es obvia y clara. En la novela, los ciegos son marginados y, una vez destruida la base de la sociedad, aflora lo peor del ser humano: crueldad, agresividad, egoísmo… Mucho de esto permanece en el film de Meirelles, aunque éste incide mucho más en la situación excepcional para remarcar la situación de los ciegos encerrados y mostrar la desolación de una ciudad desierta y sucia, cuyos pobladores vagan sin rumbo en busca de comida, sin importarles matarse entre ellos.

En la película no se observa tan bien como en el libro, pero hay una fuerte lucha por la supervivencia, problemas por la comida, o cómo los "malísimos" del manicomio se convierten en auténticos animales y obligan a las mujeres a tener relaciones sexuales. La gente en vez de vivir en sociedad empieza a aislarse en pequeños grupos de 2/3/4 personas (salvo algunas excepciones, como es el caso de nuestros protagonistas), manadas pequeñas que son fáciles de manejar. Como ya digo, prima el instinto sobre la razón y la supervivencia frente a la humanidad. De hecho en una parte desaparece uno de los compañeros (creo que en la película era un chico negro) y los demás apenas se preocupan.
La comprensión solo será completa tras la lectura de la novela, cosa que os recomiendo mucho más fervientemente que la visión de la película. Leer a Saramago es una delicia y Ensayo sobre la ceguera un reto que debéis regalaros. La abigarrada prosa de Saramago produce tal sensación de angustia y caos que es imposible abandonar la novela, aún cuando lo que pasa a través de los ojos es tan desagradable y demoledor como ver una sociedad hundiéndose, carcomida por los bajos instintos humanos, sin un sólo coletazo de esperanza que no sea la propia destrucción.

La película es una obra ciertamente diferente e impactante en muchos sentidos. La brutalidad de las imágenes puede provocar repulsa en los corazones más sensibles, ya que nos retratan -y muy bien- la maldad del ser humano. No es una película para sentarse y disfrutar. Es necesaria cierta calma mental para su visionado y no es en absoluto de fácil digestión. Ello no le resta un ápice su calidad, claro está. Meirelles como lector, nos ofrece su interpretación personal de la novela, y como cineasta realiza un film que más que respuestas, lo que nos plantea son preguntas. Y muy serias, por cierto.

Nota: 8
Nota filmaffinity: 6.4